viernes, 8 de mayo de 2009

Qué jugadores deben naturalizarse con el Tri y quiénes no

Un tema que ha pasado de moda, y estuvo por algún tiempo en la polémica fue el de los "naturalizados" de la selección mexicana. Aunque esta temática fue explotada en su momento por los medios, considero que una vez pasada la euforia sobre ello, tengo una opinión un poco más consensuada sobre esto que cuando estuvo muy en boga.

No estoy de acuerdo con esa opinión xenofóbica en la que se menciona que hay "mexicanos de segunda " o "de primera", los mexicanos son tal y como lo especifica la constitución mexicana. Sin embargo, al igual que muchos, no estoy convencido que se convoquen jugadores nacidos en el extranjero a la selección mexicana sino demuestran un nivel superior a los nacionales.
El problema con los naturalizados es que no marcan diferencia. Fíjese usted bien, acaso cree que teniendo miles de jugadores brasileños de gran nivel en todo el mundo ¿Brasil hubiera convocado a Leandro Augusto a su selección? o Argentina teniendo a extraordinarios jugadores como Lionel Messi o Juan Román Riquelme, ¿convocaría a Matías Vuoso?

Si usted está al tanto de lo que sucede en el fútbol mundial, seguramente habrá respondido que "no" a las preguntas anteriores. El autor de este blog no tiene nada con los extranjeros, por mi que hagan su vida en este país latinoamericano, disfruten sus bellezas naturales, se casen con sus habitantes y traigan aspectos provechosos que nos beneficien a todos como habitantes.
Señores, lo que pienso es que los jugadores extranjeros de fútbol son unos oportunistas que poco aportan al desarrollo futbolístico del tricolor y forman parte de un círculo vicioso que ejemplifica y ayuda al subdesarrollo futbolero azteca.

Oportunistas que no serán campeones del mundo con México. Que posiblemente terminen viviendo en México al final de sus carreras, pero que eso son, oportunistas con nombre y apellido que creen que por destacar unos cuantos torneos a cierto nivel ya creen que merecen jugar con quien sea los torneos oficiales de la FIFA que donde nacieron no lo podrían hacer ni de broma. En sus lugares de origen ni de broma serán tomados en cuenta.

Por otra parte, pienso que Zinha tal vez sea el único que marque alguna diferencia. Nery Castillo en su momento parecía otro pero la diferencia entre nosotros y él, es que sí "calienta banca" en Europa y cobra sin jugar. En cambio, los demás que juegan, lo hacen en el nuestro despreciado fútbol. Además, él se pudo dar el lujo de escoger otras selecciones: Grecia y Uruguay, pero suponemos que no le llegaron al "precio" y como en su caso, billete manda sobre profesionalismo, Castillo optó por cobrar en dólares.

Paradójicamente, el único jugador que no considero oportunista es Lucas Ayala. El jugador nacido en Argentina fue el más atacado por su convocatoria cuando Eriksson todavía era técnico. Si mal no recuerdo, el jugador ni siquiera salió a la cancha.
Ayala, a diferencia de los naturalizados que juran un "gran amor" por este país, llegó a México cuando apenas era un adolescente. Jugando desde las divisiones inferiores del balompié azteca, llegó hasta consolidarse titular y hasta hace poco, ser seleccionado nacional. Yo me olvidaba que era extranjero, de tanto tiempo que llevaba jugando. A pesar de eso, tampoco considero que tenga el nivel necesario para vestir la "playera verde". Eso sí, les aseguro que si algún día lo vuelven a convocar, lo hará con mayor dignidad que los "seleccionados" que apenas llevan viviendo un par de años en México y toman al soccer azteca como trampolín para jugar un mundial, situación que nunca experimentarán en sus países de origen. Que me perdonen Carlos Blanco, Julio Palleiro o Gabriel Caballero, naturalizados en otras épocas, pero no me dejarán mentir que jugar para la "verde" no es igual que jugar con la "verdeamarella" o la "albiceleste". Saludos y sólo es una opinión.

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