Si usted ha seguido los últimos cuatro torneos del fútbol mexicano, seguramente conocerá a José Luis Sánchez Solá "Chelís".
Para los que no, les diré que hasta antes que escribiera estas líneas, estaba firmando un año más como técnico del Club Puebla de Primera División. El "Chelís" se hizo famoso por ascender al golpeadísimo club poblano. Ahora todo el mundo piensa que el técnico español es carismático. Que es no es José Luis sino "San Chelís". Que ya es el mejor técnico de México o tal vez del mundo.
Me da la impresión que hay mujeres que hasta lo consideran guapo.
Que incluso merece estar en la selección mexicana en vez de Javier Aguirre.
Seamos francos, el "Chelís" no ha ganado nada. En especie, lo único que ha conseguido es el trofeo del ascenso a la Primera División Nacional. También salvó a los Camoteros del descenso (que no es poca cosa). El problema con este individuo es, como mencionaba en líneas anteriores, que está sobrevalorado.
Idolatrado por aficionados poblanos. Un técnico que ha conseguido fama y un prestigio gracias a las alabanzas que se han encargado de darle las televisoras con tal de inyectar rating a un torneo que carece de atractivos. Crearon un "Frankenstein" mediático que aún no ha conseguido algo para que lo consideren "el gran técnico".
Esta bien que le echen porras, pero !Exageran!
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1 comentario:
Así es, el chelís apenas empieza y se le puede augurar futuro. Pero tiene algo que los demas técnicos no muestran: Se emociona mucho en los partidos para bien o para mal y eso contagia al jugador.
Seguramente al rato algún club corporativo (donde la emocion no cuenta pero sí la lana) como tigres o cruz azul le ofrecen una buena feria y se va con ellos.
Al tiempo.
Salu2
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