sábado, 20 de junio de 2015

La lucha libre y yo

Para los que son nostálgicos, les recomiendo blog de donde es originaria ésta foto:  http://laloncheradelosrecuerdos.blogspot.mx/ 

Cuando era niño soñaba con ser luchador.
La principal razón por la que me volví aficionado en aquel entonces fue por la tele y las revistas.
Yo no era de esos niños que sus jefes llevaban a las luchas. Más bien la afición la desarrollé a través de la tele. En una época donde no existía You Tube o Netflix, los niños mexicanos teníamos que chutarnos Televisa o Imevisión. Era principios de los noventa y tener antena parabólica era para ricos.
Los primeros meses en los que Cable llegó a Mérida, ciudad donde crecí,  apenas lo tenían unas cuantas colonias al norte de la ciudad.Tiempo después estaría disponible en la mía y al fin los clasemedieros podíamos disfrutarlo.
Durante la misma época, cuando acompañábamos al centro, mi papá nos llevaba a comprar revistas en los estanquillos del Pasaje Picheta. Lo que tal vez detonaría otra de mis pasiones:  la lectura de las revistas de diversa índole. Y posteriormente, el periodismo.
 Tal vez eran las historias, ese aire de leyenda lo que me fascinaba de los gladiadores. Y las revistas justamente alimentaban eso. Era principios de los noventa, donde disfrutábamos los resabios de la considerada mejor época dorada de la lucha libre mexicana, los ochenta.



 La tele los popularizó y la tele se los quitó

Si mi memoria no me falla, la lucha libre de la CMLL (Consejo Mundial de la Lucha Libre), pasaba en horario estelar en la televisión. Después de Chabelo, si no es que a las 12 del día, en el horario donde ahora pasan los partidos del Toluca, era cuando las transmitían. Que me corrija alguien si me equivoco.
Recuerdo muy bien la publicación de la revista ARENA que traía el pleito en el que se enfrascaron Blue Panther y Love Machine. Recuerdo muy bien la lucha, la pasaron por tele y terminó en dos caídas porque Love Machine le aplicó un martinete, una llave prohibida en México. Love Machine no sabía de la prohibición y perdió el duelo de máscaras, saliendo a relucir su nombre, Arthur Barr. Black Magic, su second, no buscaba cómo consolarlo y se unió a la protesta. ARENA era de Editorial Ejea y tenía mucha relación con Televisa. Otra revista que solía comprar con frecuencia era Colosos de la lucha libre, que incluía especiales muy buenos sobre luchadores y tenía un comercial en la tele.


Blue Panther vs. Love Machine.



Canek era el luchador que más me impresionaba y me sigue impresionando. A pesar que en su momento fui fanático de Rayo de Jalisco Jr. y era seguidor de luchadores técnicos como Octagón, Atlantis, Hijo del Santo, Lizmark , El Perro Aguayo y Tinieblas, sigo pensando que las capacidades técnicas de Canek son casi sobrehumanas. ¡Es uno de los tipos que logró cargar a André El Gigante! un tipo que le duplicaba el peso. El propio Canek cuenta que terminó lesionado de las rodillas por hacer eso y hubo un momento en el que no pensó que pudiera lograrlo.

El Toreo de Cuatro Caminos y la Arena Neza fue una revelación para mi hermano y para mí. Un día cambiando canales vimos que también pasaban luchas en IMEVISIÓN. Y conocimos a los llamados independientes que actuaban en dichas arenas.
En esas funciones, estaban tipos como los Villanos,Fishman,Pegassus Kid, The Killer, Súper Muñeco, Los Misioneros de la Muerte (en su versión El Signo, Negro Navarro y Black Power), los espantos (I,II, JR,) y El Hijo del Santo. Además del mencionado Canek.

Hubo un momento en que llegó al AAA, muchos se inyectaron esteroides y se jodió todo. Un tiempo después, desaparece Imevisión y mi hermano y yo no podíamos ver luchas los sábados en la mañana. Televisa, por algo que nunca me quedó muy claro, desapareció la lucha de su programación estelar y ese fue el principio de la hecatombe. Sólo podíamos ver cachitos de la lucha en el programa de Televisa, Acción, que básicamente era un resumen de todos los deportes. Nada de la CMLL. El Toreo desapareció. De la misma forma se fue disipando mi afición por la lucha libre en dos o tres años. 

Hace tiempo, a alguien de la chamba le terminé regalando lo que me quedó de mis revistas de luchadores. Necesitaba deshacerme de esas cosas, pues ahora tengo la filosofía de deshacerme de objetos para no ser un "acumulador". Pero eso lo explicaré bien en otro post.

Ahora veo con nostalgia cuando transmitían en tele abierta la lucha libre. He aquí una de 1990, con la Arena México a reventar: