El culto que se le rinde a los deportistas millonarios

No sé ustedes, pero si tuviera el dinero que el presidente del Real Madrid Florentino Pérez, presume para derrochar, no lo gastaría en Cristiano Ronaldo. Independientemente de mi afición por el deporte, en lo personal auguro un fracaso en el club merengue.

Reconozco grandes virtudes en el futbolista portugués. C. Ronaldo es rápido, es fuerte, un líder joven, inteligente en la cancha, millonario y además, bien parecido, ¿qué más puede pedir? el tipo por donde se le mire, a sus 24 años tiene todo lo que millones quisieran tener. Sin embargo, algo me huele mal en todo esto. Hay un "pero" en el traspaso más caro de la historia del fútbol. Ese tal Pérez está traumado con galácticos y gastar lana. Se ha pasado por el arco del triunfo la historia de un club tan exitoso en el balompié. Está contribuyendo a la inflación deportiva y monetaria del soccer mundial y de los deportes profesionales. Ojalá fracasen.

Todavía en los ochenta, para ser precisos en 1981, Earvin "Magic" Johnson Jr. sorprendió un contrato que hoy, a menos de 30 años, parece paupérrimo: 25 años por 25 milllones de dólares. Era el impacto en el mundo del deporte de aquel entonces.

Hoy, enmedio de una crisis mundial, el segundo club más rico del mundo firma al "C7" por más de 100 millones de dólares. Vaya ironías de la vida. No me sorpende del Madrid, un club que se da el lujo de contratar y sentar en la banca a uno de los mejores porteros de principios de la década-Jerzy Dudek-, de gastar millones en jovencitos defensores de medio pelo como el portugués Pepe -en mi opinión, hay hasta defensas mexicanos mucho mejores que él- por 30 millones de euros simplemente por fama. Irremediablemente, su proyecto espero que fracase. Unos días antes, el equipo blanco contrató al tercer futbolista más caro del mundo, Kaká, y dice la dirigencia del club que va por más "galácticos". Alguien le debería recordar a Florentino Pérez, que billete no saca triunfos. Un ejemplo claro es cuando a él mismo le dio por contratar a los más caros de principios de esta década-Zinedine Zidane, David Beckham, Ronaldo y Luis Figo-, y los resultados fueron pobres pese a la inversión realizada. Emedio de una crisis mundial, donde el club más poderoso y millonario del mundo, Manchester United, afirma que está endeudado, tal parece que los merengues están en algo turbio, en algo sucio, que aunque no es muy comprobable, es muy sospechoso.

De cierta manera, cada vez entiendo menos el deporte profesional. La semana pasada, el jamaiquino Usain Bolt clamaba que quiere ganar lo mismo que un futbolista, porque cree que se lo merece. Lo que él no toma en cuenta es que practica un deporte -atletismo-, cuyo atención mundial no es la misma que recibe el fútbol. Hay una mafia en el soccer , los mismo que un monopolio en el boxeo y las drogas en el béisbol que permite que estos millones fluyan. El Madrid
¿Hasta donde llegará la danza "deportiva" de los millones de dólares?